El sentido de la expiación desde la epistemologías contemporáneas

Resumen

Para el cristianismo protestante y católico romano, la teología de la expiación de Cristo es una doctrina consolidada, que encuentra su fundamento en la lectura e interpretación de los textos bíblicos. La Iglesia desarrolló su teología sobre todo en la época patrística, pero también en San Anselmo, representante de la Escolástica. Éste propagó la imagen de un Dios ofendido en su honor por los pecados humanos, que exigían una satisfacción que sólo podía alcanzar Dios mismo, en su perfección. En su obra "¿Por qué Dios se hizo hombre?", Anselmo fundamentó su tesis, que sería fuente de reflexión en los años siguientes, incluido el periodo de la Reforma protestante. Los diferentes reformadores, aunque discrepantes en algunos puntos, convergieron con el pensamiento de Anselmo, afirmando de diferentes maneras la necesidad de la muerte vicaria de Jesús por los pecados humanos. En general, la Teología de la Expiación, según el pensamiento mayoritario, a pesar de apuntar al amor divino que sale al encuentro del ser humano y lo redime, no deja de destacar a un Dios que no perdona, sin sacrificios. Para ciertos autores, mencionados en el artículo, esta imagen de Dios no se ajusta a la imagen de Dios manifestada en Cristo Jesús y se atreven a repensar y redefinir tal imagen, contribuyendo a la descolonización epistemológica de la Teología, específicamente de la Teología de la Expiación. Para la Ciencia de la Religión, este tema es pertinente, ya que se refiere a uno de los temas estructurantes de la teología cristiana.