Hans Jonas y las reflexiones sobre Dios y la ética después de Auschwitz

Resumen

Los horrores del siglo XX, de los cuales Auschwitz se destaca como referencia emblemática, han puesto en cuestión la representación de un Dios absolutamente bueno y omnipotente, debido a la incompatibilidad lógica de estos atributos con el mal radical que ocurrió. Este artículo propone explorar la reflexión del filósofo Hans Jonas, que ensaya una narrativa de Dios considerando su ausencia en la tragedia de la Shoah. Refutando las justificaciones racionales de la teodicea, Jonas busca una nueva perspectiva a través de un mito cosmogónico, en el que Dios se auto-renuncia a la omnipotencia en favor de la autonomía cósmica, exponiéndose a las contingencias del mundo, insertándose y siendo afectado por el devenir del espacio-tiempo. La abdicación voluntaria de Dios promueve la autonomía del hombre, situándolo en un horizonte ético, en el que es responsable, no sólo de sí mismo, sino de toda la creación e incluso del plan de Dios, que se ve afectado por las acciones y omisiones humanas.